La alegría y la hermandad son evidentes cuando una iglesia es organizada. En el caso de Dulce Refugio, hoy la treceava Iglesia Presbiteriana de Santiago, ese gozo se vivió el pasado 1 de abril de 2023. Pero ¿qué significa una iglesia organizada? Se lo preguntamos al pastor Sebastián Romero O.

En aquella ceremonia, miembros de la Comisión Ejecutiva del Sínodo, de los presbiterios Centro, Quinta Región, Centro Sur, Sur, y presbíteros en representación de sus Iglesias locales; todos, testimoniaron la fidelidad del Señor cuando una avanzada termina por ser declarada como una Iglesia organizada.

Esto significa que se abre un proceso nuevo para los hermanos. El Moderador del Presbiterio Centro, pastor David Vilches U, a la hora de los saludos, instó a los hermanos de Dulce Refugio a perseverar en la obra del Señor, pero bajo los estándares de una Iglesia organizada.

¿Qué significa esto?, le consultamos al Pastor Titular de Dulce Refugio, Sebastián Romero O., siete semanas más tarde de la organización. “Significa consolidar el funcionamiento de nuestra Iglesia. Que la Junta de Diáconos y los distintos departamentos dialoguen en sintonía con el Consistorio. Pero también que tengamos la voluntad de seguir siendo como somos, una iglesia acogedora”, señaló.

Y agrega: “Nuestros presbíteros y diáconos fueron ordenados e instalados en el Culto de Organización, por tanto, hay un camino de aprendizaje que estamos compartiendo en estos dos meses de vida independiente”.

Desafíos con identidad

Aunque es un tiempo de aprendizaje mutuo, para el pastor Sebastián Romero hay elementos importantes a considerar en la vida de una iglesia.

“Los hermanos de Dulce Refugio están muy animados y con claras intensiones de comprometerse más con la obra. Esto marca una gran diferencia y también el acento en cómo debemos plantear un liderazgo que nos haga sentido a todos; y, claro, de la mano del evangelio”, dice.

Por de pronto, Dios mediante, han considerado para el corto plazo remodelar, o ampliar, el templo. El proyecto, que está siendo evaluado económicamente, apunta a tener nuevas salas y oficinas para el desarrollo de las actividades propias a los departamentos. ” La idea de Dulce Refugio es que esta iglesia, además de acoger a los vecinos, también sea un espacio disponible para las actividades de los hermanos de la IPCh”.

Pero hay otro desafío instalado en el corazón de esta Iglesia. Un anhelo alojado desde los días de la unión de las avanzadas “Refugio de Gracia” y “Filadelfia”, cuando ambas se unieron formalmente como la avanzada Dulce Refugio en marzo de 2019. Y es la de ser una iglesia que promueva el trabajo misional.

“Cuando Dulce Refugio se haya consolidado de aquí a cinco años, queremos plantar una segunda Iglesia Presbiteriana aquí en Maipú”. ¿Por qué no? ¿Si hoy, gracias al Señor, somos la primera iglesia de la IPCh en Maipú?

Damos gracias a Dios por su fidelidad y misericordia, y porque permite que nos gocemos del trabajo de quienes sirven con un corazón que busca adorarle.

Estemos orando especialmente por el trabajo de los diáconos ( ordenados e instalados) Carlos Burgos, Hernán Lagos y Christopher Morales.

También por su Consistorio, los presbíteros (instalados y ordenados) Rubén Arraño, César Romero y Matías Núñez.