Sobre fe, esperanza y emociones, en un contexto de incertidumbres,  se habló en el Encuentro Presbiterial de Mujeres del Presbiterio Sur, actividad que organizó la Iglesia Las Lomas y que se realizó el 16 y 17 de octubre. 

El confinamiento expuso nuestra confianza y emociones a los vaivenes de la pandemia. Sin duda son situaciones que están bajo la soberanía de Dios, pero que nos obliga como cristianos a enfrentarlas a la luz de la Palabra.

En la actividad inaugural los pastores del Presbiterio Sur reflexionaron en torno al capítulo 6 de Efesios, versículos del 10 al 20, en el que Pablo habla acerca de la armadura de Dios; tema que fue solicitado por las hermanas del Presbiterio a fin de aprender cómo poner en práctica lo que el apóstol Pablo aconseja. Después fue el turno de Carmen Gloria Retamal, quien hizo una lectura devocional en el Salmo 46, en el que llamó a las hermanas a vivir una vida llena de esperanza en el Señor.

Al día siguiente el programa comenzó con la exposición “Pandemia: Desafíos y oportunidades” a cargo de la sicóloga Juliana Thomaz de Aquino. Ella desafió a las hermanas a mirar lo positivo de las situaciones complejas, como puede ser el confinamiento o el temor a contagiarse de Covid 19, y enfocarse en la oportunidad de acercarse a Dios para experimentar su fidelidad.

Finalmente, Astrid Hecker, hermana de la Iglesia Anglicana, habló de las emociones. En el contexto de la Palabra de Dios, Astrid motivó a las participantes a aprender a dominar las emociones, a educarlas según el carácter de Jesucristo.

Al término de estas exposiciones las hermanas tuvieron un encuentro con las panelistas ( via Zoom) donde se respondieron dudas relacionadas con sus conflictos e incertidumbres.

Respecto al Encuentro, la hermana Sandra Da Silva señaló: ” fue una instancia para asumir que dependemos de Dios, y la lección es que esto debemos recordarlo para cuando la pandemia termine”.

Damos gracias al Señor por este Encuentro. Estemos orando por nuestras hermanas del Presbiterio Sur para que Jesucristo sea bendiciendo sus vidas con su sabiduría y conocimiento.